BELCHITE significa "Bello lugar", es el nombre del pueblo del que os hablaré.
Belchite
fue un pueblo de los más prósperos de principios del siglo XX en la
provincia de Zaragoza, como muchos de la región llego a tener iglesias y conventos, en aquella época significaba la economía de la comarca.
Está documentado que los primeros
pobladores de este lugar son de la época romana, aunque los lugareños dicen que de antes. Los
musulmanes dejaron su huella, y en la reconquista, Felipe III
ordenó la expulsión de los moriscos pasando a manos del Conde de
Belchite. En el siglo XVII, los pobladores de Belchite compraron su
independencia a la nobleza.
De este pueblo se podría decir que su pasado
fue maldito y tormentoso, a lo largo de la historia la mala suerte le dejo huella que aún hoy es visible, varias
batallas recorrieron sus calles. Entre otras, Belchite fue escenario de la primera batalla entre las
tropas españolas y francesas.
Los franceses ganaron la batalla y Napoleón hizo escribir el nombre de
Belchite en el arco del triunfo de París.
Belchite fue escenario de duras
confrontaciones fruto de la Guerra Carlista, pero todavía quedaba una gran
batalla que los muros de Belchite no pudieron frenar, la Guerra Civil Española. En el verano de 1937, en plena guerra civil, los
republicanos destrozan literalmente el pueblo, defendido por los
nacionales y miles de personas, entre soldados y civiles, mueren en pocos
días.
En el pueblo, apenas un puñado de casas han quedado en pie. El control republicano sobre la zona duraría poco tiempo, las tropas del General Franco acabarían por ganar la guerra.
En el pueblo, apenas un puñado de casas han quedado en pie. El control republicano sobre la zona duraría poco tiempo, las tropas del General Franco acabarían por ganar la guerra.
Finalizada la guerra, Franco ofrece a los supervivientes la opción de construir un nuevo pueblo, o, dejar que los habitantes del pueblo se ocupen de la reconstrucción y a cambio construir un canal
de regadío para llevar agua desde el Ebro.
Los Belchitenses optan por el nuevo pueblo, que se inauguró pocos años antes de nacer yo, la obra del nuevo pueblo se hizo con prisioneros de guerra, dice mi tío: que Franco fue listo, "mano de obra barata y castigo para los perdedores", también me dice que en los pueblos de los alrededores hay hijos de nacidos en el pueblo, porque prometieron que las casas serían gratuitas y no fue cierto.
Desde entonces Belchite vive con su historia a diario, MEMORIA DE UNA HISTORIA que no se ha borrado.
Los Belchitenses optan por el nuevo pueblo, que se inauguró pocos años antes de nacer yo, la obra del nuevo pueblo se hizo con prisioneros de guerra, dice mi tío: que Franco fue listo, "mano de obra barata y castigo para los perdedores", también me dice que en los pueblos de los alrededores hay hijos de nacidos en el pueblo, porque prometieron que las casas serían gratuitas y no fue cierto.
Desde entonces Belchite vive con su historia a diario, MEMORIA DE UNA HISTORIA que no se ha borrado.
Desde
entonces, el viejo pueblo de Belchite está parado en el tiempo como historia de la memoria y del pasado.
Dicen los del lugar, que es uno de los pueblos más visitado de España, pues sus ruinas son visitadas todos los años por miles de personas y dicen que todavía, si se pone bien la oreja, se oyen los disparos y lamentos de los que allí vivieron y murieron, y que sus almas todavía caminan por sus calles, bueno, esto da algo de miedo.
Dicen los del lugar, que es uno de los pueblos más visitado de España, pues sus ruinas son visitadas todos los años por miles de personas y dicen que todavía, si se pone bien la oreja, se oyen los disparos y lamentos de los que allí vivieron y murieron, y que sus almas todavía caminan por sus calles, bueno, esto da algo de miedo.
Las ruinas de Belchite han sido un centro para
investigadores de lo paranormal de todo el mundo.
Las ruinas de los conventos
de San Rafael y San Agustín, la torre del reloj, el viejo
cementerio, la iglesia de San Martín… cualquier rincón del pueblo es la imagen de lo que allí aconteció.
Esta es una de las muchas historias que se cuentan
sobre el pueblo, algunas serán ciertas, otras no, de lo que no tengo duda es que todos los que por sus
calles hemos paseado hemos tenido la misma sensación, allí pasó algo terrible y todavía se puede sentir.
Bechite merece una mención y una visita.